El sistema satelital de alerta temprana para detección de misiles SBIRS de la Fuerza Aérea de los Estados Unidos habría sido clave en evitar bajas en los ataques a las bases estadounidenses en Bagdad
El 7 de enero de 2020 un conjunto de misiles balísticos de corto alcance disparados desde Irán impactaron en dos bases militares de los Estados Unidos ubicadas en Bagdad, Irak. El ataque fue llevado adelante por Irán en respuesta a la muerte del general iraní Qassem Soleimani tras una ataque con drones de los Estados Unidos días atrás en las afueras del aeropuerto de Bagdad.
El presidente de los Estados Unidos Donald Trump dio una conferencia de prensa el 8 de enero en relación al ataque de iraní, que causó daños en la infraestructura de las bases militares pero no bajas o heridos de gravedad. Trump señaló: “El pueblo estadounidense debería estar extremadamente agradecido y feliz de que ningún estadounidense haya sido dañado en el ataque de anoche por el régimen iraní. No sufrimos víctimas, todos nuestros soldados están a salvo y solo se sufrieron daños mínimos en nuestras bases militares”.
Luego Trump agregó: “No se perdieron vidas estadounidenses o iraquíes debido a las precauciones tomadas, la dispersión de fuerzas y un sistema de alerta temprana que funcionó muy bien”.
El sistema de alerta temprana que permitió a los Estados Unidos evitar que sus tropas, y las de sus aliados en Irak, fueran alcanzadas por los misiles iraníes es el SBIRS (Space-Based Infrared System) operado por la Fuerza Aérea (USAF) para detección temprana de misiles y seguimiento.
SBIRS
El sistema SBIRS es la continuidad y evolución del sistema de alerta temprana DPS (Defence Suport Program) que la USAF operó durante décadas. Los primeros satélites DPS fueron lanzados a principios de la década de 1970 mientras que la última fase de este sistema, integrada por 10 satélites geoestacionarios, fue desplegada entre 1989 y 2007.
La experiencia obtenida en la operación del sistema DSP por la Fuerza Aérea de los Estados Unidos durante la Guerra del Golfo permitió diseñar un nuevo sistema de detección temprana de misiles con requerimientos más exigentes y tecnologías más precisas. Se estima el presupuesto total de SBIRS en más de USD15 mil millones.
Actualmente el sistema SBIRS está integrado por cuatro satélites en la órbita geoestacionaria y cuatro cargas útiles alojadas en satélites de órbita elíptica. SBIRS GEO-1 fue lanzado en mayo de 2011, SBIRS GEO-2 en mazo de 2013, SBIRS GEO-3 en enero de 2017 y SBIRS GEO-4 en enero de 2018. Los cuatro satélites del componente geoestacionario de SBIRS fueron transportados al Espacio mediante vehículos Atlas-V de United Launch Alliance (ULA).
Las cargas útiles SBIRS-HEO en órbita elíptica se encuentran alojadas en los satélites para inteligencia de señales Trumpet-6 (NROL-35), lanzado en diciembre de 2014, Trumpet-7 (NROL-42), lanzado en septiembre de 2017, también ambos mediante vehículos Atlas-V.
Los satélites SBIRS GEO son fabricados por Lockheed Martin como contratista principal y también cuentan con participación destacada de Northrop Grumman, que aporta la carga útil con capacidad de detección infrarroja, Aerojet Rocketdyne y Honeywell.
Las misiones SBIRS GEO fabricadas por Lockheed Martin se basan en la plataforma A2100M. Cada satélite tuvo un peso al lanzamiento de 4.500 kg y cuenta con una vida útil de 12 años. SBIRS dispone de sensores infrarrojos que observan la superficie terrestre con el fin de detectar el calor asociado a los motores de los misiles.
En junio de 2014 la USAF adjudicó a Lockheed Martin la fabricación de SBIRS GEO-5 y SBIRS GEO-6 por un monto total de USD1.860 millones. Estas dos nuevas misiones, diseñadas para ampliar las capacidades del sistema, están siendo actualmente fabricadas sobre la plataforma LM-2100 y tienen su lanzamiento planificado para 2021 y 2022.
SBIRS GEO-7 y SBIRS GEO-8 fueron planificados pero posteriormente cancelados. La evolución de SBIRS será el sistema de alerta temprana de lanzamiento de misiles NG-OPIR (Next-Generation Overhead Persistent InfraRed), integrado por tres satélites en la órbita geoestacionaria y dos satélites en órbita polar. Lockheed Martin es el encargado de desarrollar NG-OPIR-GEO y Northrop Grumman tiene a su cargo NG-OPIR-Polar. Ambos componentes están planificados para comenzar a ser desplegados a partir de 2023.
Fuentes: Casa Blanca, Lockheed Martin, USAF