La nave espacial china de carga Tianzhou-5 finalizó su misión y ya reingresó a la atmósfera de manera controlada este martes. La mayoría de los componentes de la nave se desintegraron durante el reingreso y una pequeña cantidad de escombros cayeron en aguas seguras designadas en el Pacífico Sur, según la Agencia de Vuelos Espaciales Tripulados de China.
El Tianzhou-5 se separó de la combinación de estaciones espaciales en órbita Tiangong el lunes y cambió a vuelo independiente. Cabe indicar que Tianzhou-5 despegó el pasado 12 de noviembre desde el Sitio de Lanzamiento de Naves Espaciales de Wenchang, en la provincia insular sureña de Hainan, cargada con propelentes, materiales para experimentos científicos y suministros para los taikonautas.
Tianzhou-5 realizó varios proyectos de aplicación llevados al espacio por la nave. Por ejemplo, el Satélite 1 de Ciencia para Estudiantes de Macao, que fue almacenado en la nave de carga antes de ser puesto en órbita el pasado 18 de diciembre.
Este satélite funciona de manera estable en órbita como una plataforma de práctica científica espacial para los radioaficionados en el área de la Gran Bahía de Guangdong-Hong Kong-Macao, a ambos lados del estrecho de Taiwan y alrededor del mundo. Permitió la cooperación y los intercambios profundos entre la parte continental de China y Macao en la divulgación y la educación de la ciencia espacial, según la agencia.
Además, la prueba en órbita de las pilas de combustible de hidrógeno y oxígeno es otro logro experimental a bordo de Tianzhou-5, proporcionando datos y apoyo teórico para las futuras exploraciones lunares tripuladas de China. Otras cargas útiles clave incluyen el equipo de detección de partículas espaciales de alta energía, que completó una misión extravehicular.