Panamá modificó el Plan Nacional de Atribución de Frecuencias (PNAF) y se convirtió en pionero en la región al buscar que operadoras satelitales como Starlink, AST Space Mobile y Globalstar Panamá, entre otros, entren al mercado nacional de las telecomunicaciones para reducir la brecha digital en zonas rurales, mejorar la cobertura y ampliar las redes con el pago de un canon anual.
La Autoridad Nacional de los Servicios Públicos (ASEP) finalizó la consulta pública No. 013-2023, determinada a través de la Resolución AN No. 19022-Telco del 22 de febrero de 2024 donde se establecen las nuevas disposiciones referentes al uso del espectro radioeléctrico para servicios de telecomunicaciones satelitales, para recibir las opiniones de los interesados en los cambios del PNAF. A su vez, se espera que se generen las condiciones para las comunicaciones directas entre móvil y satélite, conocida como D2D, en pleno desarrollo en el mercado.
En cuanto a las frecuencias para el servicio fijo por satélite de órbita geoestacionaria se establece un canon que “depende fundamentalmente de ancho de banda de la frecuencia transmitida” debido que las comunicaciones entre las estaciones de servicios fijos por satélite con satélites GEO “ocupan espectro sólo en función del ancho de banda de las frecuencias transmitidas” y que no se produce un aumento o reducción del uso del espectro.
Este canon será anual y se pagará de acuerdo al uso de frecuencia. El valor se calculó en base al costo de MHz por balboas por el ancho de banda asignado en MHz, lo que surge de los comentarios de las empresas participantes sobre el alto costo que se estaba pagando por el espectro.
La asignación de frecuencias en los casos que se requieran múltiples estaciones terrenas se efectuará bajo el concepto de “asignación en bloque” o “blanqueting” con un canon que seguirá la fórmula planteada en el caso anterior.
Por otra parte, se determinó que las prestadoras de servicios de comunicaciones móviles satelitales a través de satélites GEO o no-geoestacionarios deberán obtener una concesión de tipo B, por medio de la cual tendrán que solicitar “las frecuencias necesarias para la operación de sus sistemas”. El canon que pagarán sigue la fórmula planteada en el caso anterior pero el precio se calculará sobre kHz.
Los prestadores que efectúen estos servicios a través de satélites no geoestacionarios deberán obtener la concesión bajo la figura de “Servicio de Telecomunicación por Satélite de Baja Órbita”, es decir, los satélites LEO con los cuales se están promoviendo las comunicaciones D2D que en esta primera etapa contempla el envío de SMS y el medio de comunicación considerado más efectivo para cuando hay que efectuar comunicaciones de emergencia o en situaciones de catástrofe.
e sumará también la posibilidad de habilitar, a las operadoras móviles que tienen concesión, el uso de redes no terrestres (NTN) que “utilicen el mismo espectro radioeléctrico que ya tengan debidamente asignado, como complemento a sus redes móviles celulares”.
Para finalizar, la ASEP incluyó la compartición de espectro por parte de los operadores móviles con concesión, a pedido de las operadoras móviles. Lo cual será posible a través de acuerdos bilaterales entre las empresas con el objetivo de “mejorar la cobertura o las capacidades de sus redes en áreas rurales, desatendidas o insuficientemente atendidas”.
A través de un comunicado oficial aseguraron: “Con este paso, Panamá se convierte en un país pionero al ejecutar acciones que van de la mano de los avances tecnológicos, brindando nuevas oportunidades inexistentes en el pasado y que hoy día son posibles, como es el caso de la nueva industria satelital que ha venido mostrando la necesidad de reevaluar alternativas por la gran modernización que experimenta hoy día”.
La asignación de frecuencias en los casos que se requieran múltiples estaciones terrenas se efectuará bajo el concepto de “asignación en bloque” o “blanqueting” con un canon que seguirá la fórmula planteada en el caso anterior.
Por otra parte, se determinó que las prestadoras de servicios de comunicaciones móviles satelitales a través de satélites GEO o no-geoestacionarios deberán obtener una concesión de tipo B, por medio de la cual tendrán que solicitar “las frecuencias necesarias para la operación de sus sistemas”. El canon que pagarán sigue la fórmula planteada en el caso anterior pero el precio se calculará sobre kHz.
Los prestadores que efectúen estos servicios a través de satélites no geoestacionarios deberán obtener la concesión bajo la figura de “Servicio de Telecomunicación por Satélite de Baja Órbita”, es decir, los satélites LEO con los cuales se están promoviendo las comunicaciones D2D que en esta primera etapa contempla el envío de SMS y el medio de comunicación considerado más efectivo para cuando hay que efectuar comunicaciones de emergencia o en situaciones de catástrofe.
Se sumará también la posibilidad de habilitar, a las operadoras móviles que tienen concesión, el uso de redes no terrestres (NTN) que “utilicen el mismo espectro radioeléctrico que ya tengan debidamente asignado, como complemento a sus redes móviles celulares”.
Para finalizar, la ASEP incluyó la compartición de espectro por parte de los operadores móviles con concesión, a pedido de las operadoras móviles. Lo cual será posible a través de acuerdos bilaterales entre las empresas con el objetivo de “mejorar la cobertura o las capacidades de sus redes en áreas rurales, desatendidas o insuficientemente atendidas”.
A través de un comunicado oficial aseguraron: “Con este paso, Panamá se convierte en un país pionero al ejecutar acciones que van de la mano de los avances tecnológicos, brindando nuevas oportunidades inexistentes en el pasado y que hoy día son posibles, como es el caso de la nueva industria satelital que ha venido mostrando la necesidad de reevaluar alternativas por la gran modernización que experimenta hoy día”.
