Tanto el Túpac Katari de Bolivia como el Arsat 2 de Argentina tienen capacidades de ofrecer servicios de banda ancha, aprovechando las ventajas de la banda Ka.
El uso de los satélites es cada vez más frecuente entre los países de América Latina y si bien hay poco capaces de producir los propios, muchos buscan en su utilización, un medio para impulsar la conectividad en zonas alejadas a los centros urbanos por un lado, y garantizar la soberanía en sus telecomunicaciones por el otro. El ahorro de alquileres por satélites de uso comercial y la posibilidad de ofrecer servicios de banda en zonas rurales son ejemplos de eso.
La necesidad de masificar el acceso a internet llevó a gobiernos y empresas a invertir en el desarrollo de estas tecnologías. En ese sentido el trabajo en conjunto con el sector privado, como las operadoras y la industria en general, resulta de gran utilidad. Sin embargo, existen dificultades geográficas, que no encuentran en estas zonas ningún rédito económico.
La nueva banda de conexión de 450 Mhs no tendrá el ecosistema necesario para conectar a estas zonas alejadas, tal como afirma Leticia Pautasio en el sitio especializado telesemana.com. En ese sentido la tecnología satelital aparece como alternativa eficiente para sortear esos escollos.
Según cifras de la consultora Euroconsult, divulgadas durante el Congreso Latinoamericano Satelital de Comunicaciones y Radiodifusión que se realizó este año en México, la capacidad brindada por los satélites en Latinoamérica se duplicará en los próximos dos años. Además, se incrementará el número de operadores satelitales de los 12 actuales hasta 19 en 2017.
Los gobiernos han entendido esto y sus más recientes satélites —el Túpac Katari de Bolivia o el Arsat 2 de Argentina— tienen capacidades de ofrecer servicios de banda ancha, aprovechando las ventajas de la banda Ka.
Brasil también ha entendido la necesidad de ampliar la capacidad satelital y entre 2011 y 2015 realizó tres licitaciones de posiciones orbitales. Actualmente hay planes de lanzamiento de unos nueve satélites en el país producto de estas licitaciones.
