El satélite de comunicaciones Intelsat 33e, fabricado por la empresa Boeing, presentó fallas inesperadas y se desintegró mientras estaba en órbita. La anomalía crítica interrumpió el servicio a clientes en Europa, África y partes de la región Asia-Pacífico.
«Fue detectado un incremento considerable del número de objetos espaciales en la órbita del satélite de telecomunicaciones destruido Intelsat-33e», informó la agencia Roscosmos en un comunicado.
Según la Agencia, los especialistas «detectaron más de 80 fragmentos» del artefacto espacial siniestrado.
«Ahora se continúa recopilando información de coordenadas para detectar nuevos fragmentos del satélite destruido, que serán incluidos en los cálculos de aproximaciones peligrosas», con los satélites de telecomunicaciones rusos que se encuentran cerca, precisó Roscosmos. Se trata de los satélites de telecomunicaciones Express-AT1, Yamal-402 y Express-AM6, así como el satélite meteorológico Elektro-L.
Intelsat 33e , fabricado por Boeing Space Systems y lanzado en agosto de 2016, estaba operativo desde enero de 2017 en una posición orbital de 60 grados Este.
En el 2017 tuvo otra falla, que redujo más de tres años su vida útil, que en primera instancia era de 15 años.