El pequeño satélite brasileño SERPENS (siglas de Sistema Espacial para Realización de Investigación y Experimientos con Nanosatélites), apoyado por la Agencia Espacial Brasileña (AEB) se desintegró completamente al reingresar en la atmósfera terrestre, sobre el Océano Atlántico.
Según informó la Agencia Espacial Brasileña (AEB) las últimas señales de SERPENS fueron recibidas por el equipo de la Universidad de Vigo en España, aliado internacional del proyecto, a fines de marzo de 2016. En seis meses de operación, el nanosatélite proporcionó más de 150 mil paquetes de telemetría, más de 700 accesos de comunicaciones y dio más de tres mil vueltas alrededor de la Tierra.
En órbita, el satélite cumplió su misión: recolectó datos ambientales en una plataforma de bajo costo, desarrollada con la participación de estudiantes brasileños. El principal objetivo del Proyecto SERPENS es capacitar recursos humanos y consolidar los nuevos cursos de ingeniería aeropespacial brasileños.
El presidente de la AEB, José Raimundo Braga Coelho, afirmó que SERPENS es uno de los principales proyectos apoyados por la Agencia, que busca incentivar el interés de los jóvenes en el área espacial. “La construcción de pequeños satélites es una excelente experiencia educativa que busca formar profesionales capacitados para trabajar en institutos y universidades del país, de acuerdo con el Plan Nacional de Actividades Espaciales (PNAE)”, explicó.
De acuerdo con la profesora Chantal Cappelletti, coordinadora del proyecto por la Universidad de Brasilia (UnB), el desarrollo del pequeño satélite fue de extrema importancia para el aprendizaje de los estudiantes. “La práctica de construir un nanosatélite es una experiencia que amplía el conocimiento de los estudiantes, dado que ellos serán profesionales que contribuirán con el desarrollo del Programa Espacial Brasileño”, resaltó.
El proceso de desarrollo del satélite de pequeño tamaño fue coordinado por la Universidad de Brasilia (UnB), un consorcio formado por las Universidades Federales de ABC (UFABC), de Santa Catarina (UFSC), de Minas Gerais (UFMG) y del Instituto Federal Fluminense (IFF). Del exterior, la principal alianza fue con la Universidad de Vigo, como también la Sapienza Università di Roma (Italia) y las norteamericanas Morehead State University y California State Polytechnic University.
Para El ingeniero mecatrónico y becario de la AEB, Gabriel Figueiró, que participó del desarrollo del nanosatélite, un punto positivo del proyecto fue el aprendizaje y el intercambio de experiencias con las asociaciones internacionales. “La oportunidad de trabajar en conjunto con universidades extranjeras, como la Universidad de Vigo, al lado de ingenieros experimentados, fue fundamental para el éxito de la primera misión”, destacó.
Trayectoria
El modelo de vuelo del CubeSat fue integrado y probado en el Laboratorio de Integración y Pruebas (LIT) del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (INPE) en San José de los Campos, San Pablo, entre febrero y marzo de 2015.
En julio de ese año fue enviado a Japón y en agosto partió rumbo a la Estación Espacial Internacional (ISS). El día 17 de septiembre de 2015, el SERPENS fue puesto en órbita desde la ISS, por el módulo japonés KIBO JEM. Las señales del nanosatélite fueron captadas por radioaficionados del país y de todo el mundo.
La próxima misión de SERPENS será coordinada por la UFSC, con la ayuda de las universidades participantes del consorcio. La alternancia en la coordinación permite la participación de todas las universidades en el desarrollo del nanosatélite.
Fuentes: AEB