La misión de la Agencia Espacial Europea, a cargo del satélite Cheops, reveló que el exoplaneta LTT9779b sería el objeto más brillante del cielo nocturno al reflejar cerca del 80% de la luz solar. «Un Neptuno ultracaliente con una atmósfera altamente metálica», detallan sus descubridores.
En un informe de la revista Astronomy & Astrophysics, el astrónomo del Laboratorio de Astrofísica de Marsella, Sergio Hoyer señala que «las nubes reflejan la luz y evitan que el planeta se caliente demasiado y se evapore».
Por su parte, James Jenkins, describe: «Imagínese un mundo en llamas, cerca de su estrella, con pesadas nubes de metales flotando en lo alto, lloviendo gotas de titanio».
El exoplaneta tiene un radio 4,7 veces mayor que el de la Tierra y allí un año dura solo 19 horas. En el lado que da hacia su estrella, se calcula que la temperatura es de unos 2.000 grados.
Está cubierto por nubes metálicas reflectantes, formadas en su mayor parte por silicato -el mismo material del que están hechas la arena y el vidrio- mezclado con metales como el titanio.