China informó la actividad de dos satélites que pueden utilizarse en el monitoreo y sistemas de vigilancia.
Estas innovaciones espaciales cuentan con tecnología avanzada que les permite visualizar detalles de ubicaciones terrestres desde el espacio a miles de kilómetros de distancia.
Uno de los satélites, el Ludi Tance 4-01, se encuentra en órbita geoestacionaria a 36.000 kilómetros de la Tierra, lo que le permite mantener una posición fija sobre una región específica. Este satélite utiliza tecnología de microondas y láser para mapear áreas extensas con una resolución de 20 metros, independientemente de las condiciones climáticas.
Ambos utilizan la tecnología LiDAR (Light Detection and Ranging) en sus satélites, lo que potenció sus capacidades de observación terrestre y vigilancia. El LiDAR es una técnica de detección remota que utiliza pulsos láser para medir distancias con alta precisión, permitiendo la creación de mapas tridimensionales detallados del terreno y los objetos presentes en él.
Por ejemplo, en 2024, la empresa Changguang Satellite Technology Co. Ltd. llevó a cabo una transmisión de imágenes de detección remota de alta resolución y ultraalta velocidad con láser de satélite a tierra de 100 Gbps, utilizando el satélite «Jilin-1».
Este avance mejoró significativamente la eficiencia en la transmisión de datos y sentó las bases para futuras constelaciones de teledetección de muy alta resolucion.
Las autoridades aseguraron que ahora poseen la cámara «espía» más potente (de las que son conocidas), mientras que presumen de un novedoso sistema de monitoreo regional en órbita sincrónica.