Tras explorar Saturno, sus anillos y sus lunas durante 13 años, la misión internacional Cassini-Huygens acabará sumergiéndose en la atmósfera del planeta en lo que se denominó “El Gran Final de Cassinni”.
Cassini es un programa internacional, fruto de la cooperación entre la NASA, la ESA y la agencia espacial italiana ASI, además de otros colaboradores académicos e industriales. La nave se ha construido con la participación de 19 países y, gracias a los 12 instrumentos de la misión, varios equipos científicos internacionales de todo el mundo han logrado una mejor comprensión de Saturno y su entorno. Dos de estos instrumentos —el Analizador de Polvo Cósmico y el Magnetómetro— son responsabilidad de equipos liderados por investigadores europeos, aunque todos los equipos son realmente internacionales. En la misión han participado un total de 27 países.
La misión ha dado lugar a miles de artículos académicos. Además, la ESA da apoyo a través de sus dos antenas de seguimiento del espacio profundo: la de Nueva Norcia, en Australia Occidental, y la de Malargüe, en Argentina. Ambas, según la ESA, han desempeñado un papel importante durante los últimos meses en órbita de Cassini.
Cassini llevó la sonda Huygens de la ESA hasta Saturno, donde se separó y viajó durante 20 días hasta descender sobre la mayor luna del planeta: Titán. Huygens se posó en Titán el 14 de enero de 2005, convirtiéndose en la primera sonda en aterrizar sobre un planeta del Sistema Solar exterior.
Huygens transportaba seis instrumentos, cuatro de ellos a cargo de investigadores principales europeos y dos a cargo de investigadores estadounidenses. La sonda reveló un paisaje sorprendentemente similar al de la Tierra bajo la densa y brumosa atmósfera, rica en nitrógeno, de esta luna con costas y canales fluviales excavados por metano líquido en lugar de agua, dadas las temperaturas superficiales de unos -180 ºC. Durante las dos horas y media de su descenso, Huygens elaboró un perfil de la atmósfera en términos de presión, temperatura y densidad, midió sus vientos y efectuó mediciones in situ de la composición química de las partículas de su bruma. Huygens siguió transmitiendo datos desde la superficie de Titán durante 72 minutos más, hasta que Cassini desapareció por el horizonte.
Cassini continuó realizando descubrimientos en Titán durante sus 127 sobrevuelos cercanos, además de los numerosos sobrevuelos distantes, estudiando todos los aspectos de esta luna, desde su estructura interna hasta su superficie rica en hidrocarburos, su atmósfera y más allá, hasta la interacción con el viento solar.
Fuente: ESA