El 19 de octubre estaba previsto el aterrizaje de Schiaparelli en Marte, pero poco antes del momento esperado se perdió contacto con el módulo. Con su cámara de baja resolución, el orbitador MRO de la NASA identificó en la superficie del planeta rojo unas marcas que podrían corresponder a Schiaparelli.
El módulo demostrador tecnológico de entrada, descenso y aterrizaje Schiaparelli ingresó en la atmósfera marciana a las 14:42 GMT del 19 de octubre, para su descenso de seis minutos hacia la superficie. Sin embargo, poco antes del aterrizaje la ESA perdió contacto con el módulo. Actualmente los especialistas están analizando los datos obtenidos por la nave nodriza de la misión ExoMars, el Trace Gas Orbiter (TGO), con el fin de comprender qué ocurrió en la secuencia de descenso de Schiaparelli.
Mientras tanto, según informó la ESA, la cámara CTX de baja resolución a bordo del orbitador Mars Reconnaissance Orbiter (MRO) de la NASA tomó fotografías del sitio donde debía aterrizar Schiaparelli, en la zona de Marte llamada “Meridiani Planum”, como parte de una campaña planificada de obtención de imágenes.
La escena posee una resolución de seis metros por píxel y muestra dos nuevos rasgos en la superficie cuando se compara con una imagen tomada por la misma cámara en mayo de este año. Una de las marcas es brillante y puede estar asociada con el paracaídas de 12 metros de diámetro utilizado en la segunda etapa del descenso de Schiaparelli, tras la entrada inicial del escudo térmico. El paracaídas y el escudo trasero asociado se separaron de Schiaparelli antes de la fase final, durante la cual los nueve propulsores deberían haberle bajado la velocidad hasta frenarlo justo sobre la superficie.
La otra nueva característica en la imagen es una marca oscura y borrosa de unos 15 x 40 metros de tamaño, ubicada un kilómetro al norte del paracaídas. Esto se interpreta como un levantamiento producto del impacto del módulo Schiaparelli tras una caída libre mucho más larga de la planificada, luego de que los propulsores fueran apagados en forma prematura.
Se estima que Schiaparelli cayó desde una altura de entre 2 y 4 kilómetros, lo cual produjo un impacto a una velocidad considerable, superior a los 300 kilómetros por hora. El tamaño relativamente grande de la marca observada en la imagen, provendría de la dispersión de material superficial. También es posible que el módulo haya explotado en el impacto, dado que los tanques de combustible de los propulsores todavía estaban llenos. Estas interpretaciones preliminares serán refinadas a partir de nuevos análisis.
Una mirada más cercana de estas marcas será obtenida la semana próxima con la cámara HiRISE de más alta resolución a bordo de MRO. Se espera que revelen la ubicación del escudo térmico frontal, arrojado a mayor altitud.
Dado que la trayectoria de descenso del módulo fue observada desde tres ubicaciones diferentes, los equipos confían en que serán capaces de reconstruir la cadena de eventos con gran precisión.
La posición de la marca oscura muestra que Schiaparelli impactó aproximadamente 5,4 kilómetros al oeste del lugar de aterrizaje previsto.
Mientras tanto, el equipo continúa decodificando los datos extraídos de la grabación que TGO realizó de las señales de descenso de Schiaparelli, con el fin de establecer correlaciones con las mediciones hechas por el Telescopio GMRT, ubicado en la India, y con la misión Mars Express de la ESA. Una importante cantidad de datos valiosos fueron transmitidos a TGO desde Schiaparelli durante el descenso y están siendo analizados por los ingenieros.
El orbitador TGO de ExoMars está actualmente en una órbita de 101.000 km x 3.691 km, respecto del centro del planeta, con un período de 4,2 días. La nave está trabajando muy bien y tomará datos científicos de calibración durante dos órbitas en noviembre 2016.
Entonces estará listo para las maniobras planeadas que comenzarán en marzo 2017 y continuarán durante casi todo el año, llevando a TGO a una órbita circular a 400 kilómetros de altitud alrededor de Marte.
TGO comenzará en ese momento su misión científica primaria para estudiar la atmósfera de Marte en la búsqueda de posibles indicadores de vida bajo la superficie, y para actuar como estación transmisora de telecomunicaciones para ExoMars 2020.
Fuente: ESA
