La Agencia Espacial Europea (ESA) presentó en una conferencia de prensa virtual las primeras imágenes tomadas por su sonda Solar Orbiter, las más cercanas al Sol que se hayan tomado al día de hoy.
A cinco meses de su lanzamiento a bordo de un cohete Atlas-V operado por United Launch Alliance, las imágenes fueron captadas por la sonda a una distancia de aproximadamente 0.5 AU o 77 millones de km del Sol. Se tomaron durante la etapa inicial de verificación de los sistemas de la Solar Orbiter, y permitieron registrar por primera vez un fenómeno que los investigadores denominaron “hogueras”, que parecerían ser versiones más pequeñas de las fulguraciones solares, aunque es demasiado pronto para determinar si se trata del mismo fenómeno o si tienen otra causa. En este sentido, Daniel Müller, investigador del proyecto de Solar Orbiter, explicó que las imágenes se tomaron para verificar el funcionamiento de los instrumentos y la sonda, y que todavía falta un tiempo para que comience la etapa de investigación. La sonda aún debe realizar algunas maniobras de asistencia gravitatoria con Venus y la Tierra para terminar de ajustar su órbita.
Dentro de dos años estará a aproximadamente un cuarto de la distancia entre el Sol y la Tierra, y eventualmente su trayectoria la llevará por fuera del plano de la eclíptica, con lo que obtendrá por primera vez imágenes de los polos del Sol, desde un punto de vista nunca antes alcanzando.
“Estas son sólo las primeras imágenes y ya podemos ver fenómenos nuevos muy interesantes”, dijo. “No esperábamos resultados tan excepcionales desde el comienzo. También pudimos ver cómo los diez instrumentos científicos se complementa entre sí, brindándonos un panorama holístico del Sol y su entorno”, completó.
La sonda está equipada con dos tipos de instrumentos: seis de detección remota (telescopios) y cuatro instrumentos de medición “in situ” que registran el entorno en el que se encuentra la nave. Utilizando información de ambas clases de instrumentos, los científicos intentarán confirmar correlaciones entre fenómenos que se observen en el Sol con el viento solar y la región en la que se esté la sonda.
Respecto de la duración de la misión, Müller declaró: “La sonda está diseñada para durar diez años. Gracias a un lanzamiento preciso no tuvimos que realizar maniobras de corrección y pudimos conservar combustible lo que permitirá extender al máximo la vida útil de la Solar Orbiter. El otro factor determinante será la lluvia de partículas que reciban los paneles solares que los irán degradando con el tiempo”.
Solar Orbiter es una misión espacial de colaboración internacional entre la ESA y la NASA. Diecinueve Estados miembros de la ESA (Alemania, Austria, Bélgica, Dinamarca, España, Finlandia, Francia, Grecia, Irlanda, Italia, Luxemburgo, Noruega, Países Bajos, Polonia, Portugal, Reino Unido, República Checa, Suecia y Suiza) y la NASA han contribuido a la carga útil científica o la nave. El satélite ha sido construido por el contratista principal, Airbus Defence and Space, en el Reino Unido.
Por Franco Meconi (Twitter, Instagram)
Fuentes: ESA