Objetivos y características de la próxima versión del lanzador europeo. Mejoras sustanciales en los costos para el acceso al Espacio.
En el año 2014, con el objetivo mantener el liderazgo de Europa en el mercado de lanzamientos espaciales y garantizar la independencia en el acceso al Espacio, el Consejo de Ministros de la ESA tomó la decisión de desarrollar un vector de nueva generación, el Ariane-6.
Los estados participantes son: Alemania, Austria, Bélgica, Francia, Alemania, Irlanda, Italia, Países Bajos, Noruega, Rumania, España, Suecia y Suiza.
Objetivos y características principales
El principal objetivo de Ariane-6 es proporcionar a Europa el acceso al Espacio a precios competitivos sin la necesidad de apoyo del sector público para la explotación del servicio.
Ariane-6 deberá ser capaz de llevar adelante una amplia gama de misiones. Deberá colocar cargas útiles en la órbita geoestacionaria, ya sea directamente o a través de órbitas intermedias como la Órbita de Transferencia Geoestacionaria (GTO, por las siglas en inglés). También tendrá la capacidad de colocar satélites en órbitas medias y bajas.
Al igual que Ariane-5, Ariane-6 tendrá una etapa central criogénica y aceleradores de combustible sólido. Habrá dos versiones de Ariane-6: el A62 tendrá dos cohetes aceleradores de combustible sólido y el A64, cuatro.
La versión A64 tendrá la capacidad de colocar en Órbita de Transferencia Geoestacionaria 10,5 toneladas, mientras que el A62 será capaz de lanzar 5 toneladas. Una de las mejoras introducidas es la posibilidad, en el modelo A62, de despegar con un sólo satélite a bordo, a diferencia del Ariane-5 que debe hacerlo con dos satélites. Esta mejora introducida permitirá a Arianespace ganar flexibilidad en el mercado de lanzamientos.
Los cohetes aceleradores de las versiones A62 y A64 son comunes a los que utilizará el lanzador Vega-C, evolución del actual lanzador Vega.
La longitud del lanzador será de 63 metros. La carga de la etapa principal criogénica será de alrededor de 150 toneladas de proponente.
El primer lanzamiento de Ariane-6 está establecido para el año 2020.
Actores involucrados
La Agencia Espacial Europea (ESA) está fuertemente involucrada en el desarrollo de Ariane-6 supervisando completamente el diseño y adquisición del sistema de lanzamiento. ESA tiene un equipo completo instalado en las facilidades del contratista principal para el diseño y construcción del Ariane-6 Airbus Safran Launchers (ASL).
Mientras que la ESA establece los requerimientos para las misiones de la institución, los actores privados de la industria son responsables de identificar las necesidades y requerimientos comerciales.
El Centro Espacial Europeo de Kourou, en la Guyana Francesa, será la base de lanzamiento del nuevo lanzador europeo.
El 10 de junio de 2016, Ariane-6 aprobó su diseño preliminar.
Costos
Cuando se diseñó el Ariane-5, no había fuertes requerimientos de costos para hacerlo competitivo en el mercado de lanzamientos. Sin embargo, desde entonces el panorama ha cambiado, principalmente por el éxito de SpaceX. También en la actualidad hay otros proveedores de lanzamiento buscando ganar parte de un mercado relativamente pequeño.
International Launch Services (ILS) comenzó a ofrecer el servicio con cohetes Angara producidos por la empresa rusa Khrunichev. Mitsubishi Heavy Industries está diseñando el lanzador H3 con la capacidad de realizar 10 lanzamientos al año. United Launch Alliance (ULA) está desarrollando el lanzador Vulcan para gobierno y misiones comerciales.
El CEO de ASL, Alain Charmeau, declaró recientemente que el nuevo diseño de Ariane-6 permitirá reducir en un 40 o 50% los costos de lanzamiento con prestaciones similares a las de Ariane-5.
Para realizar la reducción de costos necesaria para que el nuevo lanzador europeo sea competitivo en el mercado, ASL tiene diversas estrategias. La especialización de proveedores en términos de tecnología permitirá realizar en una misma localidad de Europa lo que antes, para Ariane-5, se realizaba en cinco. Nuevas tecnologías como la impresión 3D y procesos más afectivos para la construcción del lanzador también aportan mejoras en los costos. Sin embargo, la reutilización, concepto en desarrollo por otras empresas de lanzamiento, no es uno de los pilares de la mejora. Según Charmeau, los cinco lanzamientos comerciales anuales estimados para Ariane-6 ofrecen un panorama distinto respecto a los competidores norteamericanos que disponen de entre 15 y 25 lanzamientos cautivos al año. En este escenario, el CEO de ASL declaró que la reutilización no es la respuesta adecuada para Ariane-6, aunque trabajan en el tema.
Un lanzamiento del Ariane-A62 tendría un valor de mercado de 70 millones de dólares, mientras que uno de la versión A64 rondaría los 100 millones. Una mejora notable respecto a los 180 millones que cuesta actualmente un lanzamiento de Ariane-5.
El primer lanzamiento está estimado para 2020 y partir del año 2023, Ariane-6 tendría entre 10 y 12 lanzamientos anuales. La inversión necesaria para desarrollar este nuevo lanzador ronda los 3 mil millones de euros, donde la ESA aporta 2.400 millones.
Video del Ariane-6
Fuentes